15 de diciembre de 2013

Carta abierta de un «Vigilante de Seguridad» a toda la Sociedad.

Soy «Vigilante de Seguridad», no soy un "policía frustrado", no soy un "matón descerebrado" , no soy un "analfabeto", ni un "tarado con porra"; soy un «Vigilante de Seguridad», «SOY UN PROFESIONAL SUJETO AL IMPERIO DE LA LEY», que tiene derechos, pero sobre todo unas obligaciones inherentes a su cargo, y que ha recibido, y debe seguir recibiendo, la formación más completa posible para llevar a cabo su misión legal y legítima.

Soy «Vigilante de Seguridad», mi función principal es GARANTIZAR LA SEGURIDAD DE PERSONAS Y BIENES que estén bajo mi protección, y lo haré SIEMPRE, sea cual sea el origen de la amenaza o el riesgo que se presente, tratando de salvaguardar tu integridad y tu vida con todos los medios a mi alcance, iré a buscarte si estás atrapado/a, te ayudaré si estás herido/a, te protegeré si estás amenazado/a, trataré de recuperar lo que te hayan quitado...y lo haré aunque sólo estés allí de paso, aunque no seas tu quien me pague; LO HARÉ PORQUE ES MI TRABAJO.

Soy «Vigilante de Seguridad», estoy donde no está la policía, da igual el color de mi uniforme o el emblema de mi brazo, lo llevo en mi placa, soy «VIGILANTE DE SEGURIDAD», y me debo a la Ley y al ordenamiento jurídico mucho más que a la empresa... Es mi obligación legal y moral.

Soy «Vigilante de Seguridad» y aún habiendo recibido insultos y amenazas de toda índole en mi labor, JAMÁS ME HABIA SENTIDO MÁS HUMILLADO Y RESIGNADO QUE TRAS LAS ÚLTIMAS 24horas. 
La aprobación de la Nueva LSP ha dejado patente no sólo el desconocimiento profundo que la sociedad y sobre todo los medios de "comunicación" tienen sobre nosotros. Nuestras funciones y nuestro trabajo, sino que además, han abierto la veda para que ciertos representantes de policías y guardias civiles (Seguro que pocos de los que nos tratan de verdad a diario) ¡viertan toda clase de improperios y exabruptos contra nosotros!, aumentando además la confusión de los medios de comunicación y la ciudadanía con la consiguiente "alarma social" que, esperemos que no se vuelva contra nosotros, si no se rectifica a tiempo. 
Estas cicatrices son más profundas que las que llevo en mi cuerpo por mi trabajo.

Soy «Vigilante de Seguridad», y todo esto es INJUSTO.

Por favor, CORDURA Y SENTIDO COMÚN, estamos para ayudar y apoyar, «EL ENEMIGO NO VISTE DE UNIFORME».
Firma: Un Vigilante de Seguridad.