3 de enero de 2014

Serramar aún debe unos 2.300 euros a cada vigilante del CETI

Los representantes sindicales de los empleados se reúnen la próxima semana con la Inspección.
La situación de los trabajadores de vigilancia del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) continúa sin solucionarse. La empresa adjudicataria del servicio, Serramar, adeuda una media de más de 2.300 euros a cada empleado, según explicó ayer en declaraciones a El Faro, el representante sindical de los vigilantes, Dámaso García.
Según precisó García, la empresa aún no ha abonado la paga extra de Navidad (unos 1.000 euros por empleado) ni la nómina de diciembre (unos 1.300 euros). Asimismo, señaló que a algunos de los trabajadores se les debe parte del sueldo de noviembre. El representante sindical señaló que las cantidades varían en función de la categoría de cada empleado, pero recalcó que lo realmente preocupante es que la situación continúa siendo la misma que hace unos meses.
Asimismo, aseguró que por el momento no han tenido ninguna información nueva por parte de la empresa, más allá de lo que les dice el trabajador que sirve de enlace entre la plantilla y la central. “Él está intentando hacer lo que puede, pero tampoco puede darnos más información de la que le facilitan”, señaló.
Ante los nuevos impagos, García apuntó que la intención, a priori, es volver a concentrarse en señal de protesta. No obstante, apuntó que aún no hay fechas definidas, porque están a la espera de reunirse con la Inspección de Trabajo. El representante de los empleados dijo que el encuentro se celebrará, casi con total seguridad, la próxima semana y apuntó que en función de las conclusiones de esa reunión decidirán si vuelven a concentrarse, aunque insistió en que todo apunta a que volverá a haber protestas.
Hay que recordar que la Inspección de Trabajo ya ha sancionado con una multa de 6.000 euros a la empresa Serramar por los retrasos en el pago a los trabajadores del servicio de vigilancia del CETI. Además, los trabajadores se concentraron por última vez a finales del mes pasado en la plaza del Sagrado Corazón para volver a protestar por la situación. Los impagos por parte de Serramar a los vigilantes lleva siendo una realidad desde hace más de dos años.