4 de febrero de 2016

Uno de los Ttes coroneles que chantajeaba a empresarios de seguridad se embolsó 114.850€

En la presunta trama de corrupción dentro del Ejército, en la cual, dos tenientes coroneles, E.R.R. y C.P.R., extorsionaban a las empresas de seguridad que prestaban servicios al Ministerio de Defensa.
La Policía Judicial certifica en un informe que E.R.R. realizó gran cantidad de ingresos en efectivo que no superaban los 3.000 euros, la investigación también constata que C.P.R., el otro militar implicado en la trama, se transfirió entre dos cuentas corrientes suyas cantidades cercanas a los 17.000 euros.
Dinero, un reloj y entradas al palco del Bernabéu a cambio de facilitar contratos con el Ministerio de Defensa.
Hasta 114.805 euros se ingresó el teniente coronel E.R.R., uno de los dos militares que está procesado como presunto autor de un delito continuado contra la Hacienda en el ámbito militar y un delito de negociaciones y actividades prohibidas a funcionarios públicos. Como ya adelantó este periódico, tanto este teniente coronel como su compañero C.P.R. cobraban sobornos de empresas a cambio de agilizar trámites y adelantar los pliegos de condiciones.
En un informe redactado por la Unidad Orgánica de Policía Judicial en el que se analizaba los movimientos de cuentas bancarias de los dos tenientes coroneles se constata que E.R.R. realizaba una gran cantidad de ingresos en efectivo, los cuales “podrían ser resultado del pago de comisiones llevadas a cabo por responsables de empresas a E.R.R. (…) en consideración a su función o por la mediación del mismo para que estas empresas logren ganar las licitaciones a las cuales se presentan”.
De este modo, ninguno de los ingresos en efectivo realizados por E.R.R. superaba la cantidad de los 3.000 euros, con lo que para la Policía Judicial pretendía evitar la declaración de los mismos ante la Agencia Tributaria y la posible procedencia ilícita de los mismos, tal y como obliga la ley de prevención de blanqueo de capitales. Los ingresos se realizaban de manera casi periódica y siempre con cantidades redondas e incluso a veces con idénticos importes.
En el informe se hace hincapié en que en días próximos el teniente coronel llegaba incluso a realizar hasta tres ingresos en efectivo para no tener que declararlos a Hacienda y para que la entidad bancaria no tenga la obligación de dar cuenta de los movimientos al Banco de España.
Para la Policía Judicial estos ingresos resultan “difícilmente justificables” ya que E.R.R. percibe en nómina el total de sus retribuciones y además está sujeto a un régimen de incompatibilidades que le impediría el ejercicio de otra actividad retribuida por importes tan elevados.
En total E.R.R. ingresó 114.850 euros, de los que 20.000 corresponden al ingreso que le hizo una de las empresas con el que posteriormente pagó la entrada de un Audi A5 Sportback, y un cheque bancario de 24.000 que tiene una procedencia aún desconocida.
No obstante, el coronel auditor titular del tribunal que ha llevado a cabo la investigación indica en el auto que “aún no hallando explicación posible a tan anómala forma de recibir ingresos, no se ha podido acreditar que dichas cantidades (a excepción de los 44.000 euros citados en el anterior párrafo) fuera producto de la actividad ilícita desarrollada por el teniente coronel E.R.R. en relación con las empresas que contrataban con el Ministerio de Defensa”.
Por su parte, las cuentas bancarias de C.P.R. también representan anomalías para Policía Judicial, sobre todo las cantidades cercanas a los 17.000 euros de los cuales se nutría la cuenta bancaria investigada. Así, el informe apunta que “es de significar” que esta cantidad proviene de otra cuenta corriente en la que también figura como titular. Para la investigación esto hace considerar que C.P.R. realiza estas transferencia entre cuentas de su titularidad “con el fin de integrar los beneficios obtenidos por los que se le estimaría una posible actividad ilícita como podría ser el cobro de comisiones que dan lugar a las presentes; siendo este modo de integración de activos habitual entre personas que blanquean capitales”.
A estos 17.000 se habría que sumar también unos 4.000 euros ingresados en cheque y en efectivo. En otra cuenta bancaria titular de este coronel también se aprecia el ingreso de 9.000 euros en efectivo y 10.100 euros de transferencias recibida de otras cuentas.
Sin embargo, al igual que en el caso de E.R.R., el coronel auditor encargado del caso tampoco ha podido acreditar por ahora que estas cantidades sean consecuencia directa de la actividad ilícita llevada a cabo por C.P.R.