11 de marzo de 2016

Securitas Direct fue condenada en 2015 a abonar cerca de 800.000 euros a las compañías de seguros que cubrían las viviendas de sus clientes y cuyas alarmas no saltaron

De la treintena de recursos presentados en la Audiencia Provincial, Securitas solo fue absuelto en 4 de ellas. La Compañía, presidida por Antonio Anguita Ruiz, insiste en que cumple “estrictamente” con la normativa y que actúa “conforme a Ley”
La inhibición es a las alarmas lo que el butrón a las joyerías, lo que el óxido al hierro o, para que los más legos en la materia lo entiendan, lo que la kryptonita a Superman. La inhibición de radiofrecuencias es una técnica que genera interferencias de modo intencionado en una radiocomunicación, provocando que un dispositivo concreto no emita señal alguna. Esta práctica parece haberse instalado con fuerza en los modus operandi de las bandas criminales que se rigen bajo la ley del hampa. Ante este contratiempo, compañías como Securitas Direct, han desarrollado sistemas que protejan a los clientes de la inhibición de sus alarmas. El nuevo sistema permite que, a pesar de que se neutralice la alarma a través de un corte de línea fija o inhibición de frecuencia, ésta pueda notificar el fallo a la Central Receptora de la Compañía presidida por Antonio Anguita Ruiz. De este modo, aunque se inhiba la señal GSM, las alarmas seguirán enviando señal a través del sistema Red ATN.