19 de noviembre de 2016

El francotirador también tuvo en su diana a la plantilla del Madrid y a Florentino Pérez

Santiago Sánchez grabó con la mira de su rifle a las estrellas y al presidente del club blanco desde el interior de una furgoneta aparcada en los accesos de Valdebebas
Santiago Sánchez Ramírez no solo estaba obsesionado con demostrar los supuestos fallos de seguridad de la familia real y el Gobierno perpetrando simulacros de atentado. También apuntó con sus armas a las estrellas del Real Madrid y al presidente del club, Florentino Pérez, para poner a prueba las medidas de protección del club blanco. La seguridad del Real Madrid fue precisamente la que alertó a la Policía Nacional de que un individuo se había puesto en contacto con ellos para facilitarles imágenes que interpretaron en clave amenazante. En ellas aparecían Cristiano Ronaldo, Bale, Isco, Marcelo, Sergio Ramos y Karim Benzema, entre otros. El autor resultó ser Sánchez Ramírez, un rotulador de vehículos en paro de Torrejón de Velasco (Madrid) que el pasado martes fue juzgado en la Audiencia Nacional por un delito de depósito de armas de guerra y otro de tenencia de armas de fuego. La Fiscalía pide para él nueve años de cárcel.
Las fotografías que Sánchez Ramírez hizo a los jugadores están incorporadas al sumario, al que ha tenido acceso El Confidencial. La mayoría fueron tomadas a la salida de la ciudad deportiva de Valdebebas, el lugar de entrenamiento del equipo merengue. En una de las fotos, aparece en primer plano el propio francotirador junto a Arbeloa mientras este firma autógrafos en el interior de su vehículo. En otra imagen, se aprecia a Marcelo en el asiento del copiloto de otro coche. También hay un primer plano de Benzema sonriendo a la cámara y otro de Sergio Ramos posando con aficionados. En otras capturas, aparecen Carlo Ancelotti y Florentino Pérez a los mandos de su coche.
Con esas imágenes, Sánchez Ramírez pretendía demostrar que cualquier potencial atacante podía acercarse a las estrellas del equipo, como había hecho él mismo, y poner en riesgo su integridad. Pero las fotografías que desataron la alarma en las altas esferas del Real Madrid y provocaron que el club avisara a la Policía Nacional de las maniobras del acusado fueron otras realizadas en las que los jugadores y directivos de la casa blanca habían sido fotografiados a través de la mira telescópica de un rifle.
En efecto, en los registros que realizó la brigada provincial de información de la Jefatura Superior de Policía de Madrid cuando detuvo al supuesto francotirador, el 30 de julio de 2014, los agentes encontraron varios discos duros y ordenadores con imágenes tomadas con el visor de un arma larga, aparentemente, desde el interior de una furgoneta aparcada en los accesos de la ciudad deportiva de Valdebebas. Algunas de ellas ya habían sido colgadas por el propio autor en redes sociales como Twitter y Youtube. La téorica diana del rifle se detiene sobre los vehículos de los jugadores y directivos del club. En un grupo de imágenes, el objetivo se coloca directamente sobre la zona del conductor.